domingo, 24 de abril de 2011

Empatía

Diariamente observamos demostraciones de la escasa preocupación por el prójimo y sus necesidades, junto a otras que reflejan interés por los demás. ¿Cómo surge la preocupación por otra persona? De acuerdo a Winnicott la preocupación por otro es un aspecto importante de la vida social. Surge en la relación temprana entre el bebé y su madre, y depende de un ambiente suficientemente bueno que permita construir un vínculo de confianza en el que el niño pueda experimentar el mundo como bueno y confiable para aprender a preocuparse por otros. Ahora, preocuparse de alguien cercano, con el que nos identificamos es relativamente fácil de entender, pero cómo preocuparnos por las personas que sentimos lejanas, diferentes, y en algunos casos, hasta amenazantes. Max-Neef señala que “cuando perteneces entiendes”. Es decir, si nos sentimos parte del mundo de los otros, de la situación que vive el resto, podemos sentir empatía con ellos, percibir sus necesidades y buscar maneras de cubrirlas. Entonces ¿cómo desarrollar la capacidad de preocuparnos, de buscar el bienestar común? El trabajo debe empezar en la familia y luego tendría que enfocarse en intentar sentir nuestra sociedad como una colectividad de individuos con los mismos derechos, las mismas necesidades que deben ser satisfechas y la legítima búsqueda de oportunidades equitativas.

domingo, 17 de abril de 2011

Amor y estudios

Generalmente escuchamos a los padres decir que sus hijos no deben tener enamorado (a) porque descuidarían sus estudios. La creencia extendida es que el amor y los estudios no son compatibles, ya que mantener una relación amorosa favorece que las personas pierdan el tiempo, se distraigan y dejen de lado lo que debería ser su prioridad. No obstante, desde esa misma lógica tampoco podrían mantener una relación amorosa los adultos que estén haciendo una maestría o postulando a un puesto más alto en el trabajo. No necesariamente uno debe optar por uno u otro, lo adecuado es balancear el tiempo que se le da a cada aspecto. Entonces ¿Qué puede estar detrás de esta creencia? Una posible explicación es que tras esa oposición sobre las relaciones amorosas de los hijos se esconda el temor a que interrumpan sus estudios por un embarazo no deseado pero ello no se dice directamente. Lo paradójico es que el miedo a hablar del tema, tal vez para no conjurarlo, hace que se prohíba de raíz cualquier relación, lo que a la larga puede traer más dificultades, ya que resulta más atractivo lo prohibido, y sin información, guía ni prevención, podría ocurrir justamente lo que los padres temen.

miércoles, 13 de abril de 2011

No imponga ideas

Hablar de política siempre es complicado y puede llevar a desacuerdos o peleas dentro de la familia.
Sin embargo, es importante hablar de esta para que sus hijos aprendan a formar su propio criterio como ciudadanos. Para ello promueva el diálogo y la evaluación de las diferentes propuestas. No imponga ideas ni preferencias para que ellos puedan hacer su propia elección. Explíqueles que todas las opiniones son válidas y merecen respeto.
Dígales por qué prefiere a su candidato y cuáles considera que son las características que creen que debería tener un buen gobernante. Escuche la opinión de ellos y, lo más importante, cuídese de no fomentar la intolerancia y la discriminación de otros puntos de vista.

http://elcomercio.pe/impresa/edicion/2011-04-13/ecme130411a09/02

domingo, 10 de abril de 2011

Vacío emocional

Muchas personas refieren en el consultorio que sienten un “vacío”, intentando explicar con ello una sensación de falta de algo, una necesidad emocional no satisfecha que se experimenta como una oquedad interior que debe ser cubierta. Ello provoca un sentimiento de insatisfacción que se intenta “llenar” de diversas maneras: con comida, drogas, sexo, compras, etc.; lo que generalmente brinda una gratificación  pasajera que ayuda a manejar esta sensación. Sin embargo, luego este aliciente desaparece rápidamente, acompañado, en la mayoría de ocasiones, de remordimiento y culpa por la conducta realizada. Esto puede repetirse de manera compulsiva reduciendo el malestar a corto plazo pero sin cambiar el fondo del problema. Si bien todos podemos experimentar en algunos momentos esta sensación de vacío relacionada a alguna pérdida real o simbólica, cuando este sentimiento es constante, podríamos estar frente a una depresión o una patología del vacío. Diversos especialistas señalan que el incremento de personas que sufren estas patologías estaría relacionado a la tendencia al consumismo. Tenemos cada vez más cosas materiales pero nos sentimos cada vez más carentes emocionalmente, ya que el acumular cosas o experiencias no llena nuestro mundo interno, ni logra satisfacernos como personas. Es importante recordar que no se trata de tener, se trata de ser.


Publicado parcialmente en el suplemento Mi Hogar de El Comercio el 10 de abril de 2011
 http://elcomercio.pe/impresa/notas/vacio-emocional/20110410/740413

domingo, 3 de abril de 2011

Educar con el ejemplo

¿Cuántas veces se ha preguntado si está educando bien a sus hijos? Lamentablemente para ello no hay manuales ni fórmulas mágicas. No es suficiente con instaurar normas y reglas de comportamiento específicas y recordarles a cada minuto lo que no deben hacer. Educar es un trabajo diario en el que están involucrados diversos aspectos como reforzar conductas adecuadas y eliminar las inadecuadas, acompañar sus logros y brindar apoyo emocional, entre otras cosas. Sin embargo, generalmente pasamos por alto que nuestra conducta es observada por los niños siempre y es más lo que aprenden de nuestra manera de actuar y comportarnos, que de lo que les decimos que hagan. Esto se debe al aprendizaje por observación. Los padres son modelos socializadores muy importantes para los hijos, y lo que estos hagan, será imitado por los niños. Por ello, no tire papeles a la calle, si no quiere que sus hijos lo hagan; no grite, mienta o insulte para que ellos no sigan ese ejemplo. Intente guiarse siempre por valores y principios claros, y sea consecuente con ellos. Recuerde que cada “desliz” que usted cometa en algunas circunstancias será registrado fielmente por sus hijos y el mensaje que recibirán será que las normas se pueden saltar o quebrar dependiendo del momento o las conveniencias. Dé el ejemplo para que sus hijos expresen en su conducta los valores que desea.

http://elcomercio.pe/impresa/notas/educar-ejemplo/20110403/736968